domingo, 10 de junio de 2007

Asamblea Informativa de la LNCCR


A los integrantes de los Comités Ciudadanos

A los Delegados de la CND

A las mujeres y hombres libres

Por este medio, se les invita a que este lunes 11 de junio a las 5 PM asistan a la Glorieta del Metro Insurgentes a la asamblea informativa de la LNCCR.

México, Distrito Federal a 10 de junio de 2007.

¡El que no vaya es panista o de Nueva Izquierda!©

Atentamente

Liga Nacional de Comités Ciudadanos en Resistencia

©Todos los derechos reservados, aunque se enoje Marco Rascón, quien por cierto nos debe una lana por usar la frase sin nuestra autorización.

Màs abusos del ejèrcito

Descarta la comisión que los tiros contra las víctimas fueran hechos a corta distancia

Los civiles atacados por soldados en Sinaloa no dispararon armas: CNDH
Demanda a la Secretaría de la Defensa explicar situación de los efectivos
involucrados



EMIR OLIVARES ALONSO

La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) informó que sus investigaciones sobre el ataque de militares a la familia Esparza Galaviz en el municipio de Sinaloa de Leyva, Sinaloa, revelan que los agredidos "no dispararon armas de ningún tipo", además de que los tiros en su contra "no fueron efectuados a corta distancia", como han afirmado las autoridades.

El primero de junio, Adán Abel Carrillo Esparza conducía una camioneta cuando soldados le ordenaron detenerse en un retén, en el contexto de los operativos militares contra la delincuencia organizada.

La versión oficial señala que el conductor no se percató de la orden, por lo que los militares dispararon al vehículo, con lo que provocaron la muerte de Griselda Galaviz Barraza, de 25 años; Alicia Esparza Parra, de 17, y los niños Joniel, Griselda y Juana Esparza Galaviz, de siete, cuatro y dos años, respectivamente. Además resultaron heridos el conductor, de 29 años; Teresa Flores, de 16, y José Carrillo Esparza, de cinco.

Tras una queja interpuesta, la CNDH investiga el caso, por lo que ha solicitado a la Dirección General de Justicia Militar de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) "explicar si se inició alguna averiguación previa en el fuero militar y, en tal caso, el delito o delitos que se investigan, así como los responsables, las diligencias realizadas hasta el momento y otros aspectos indispensables para esclarecer por completo lo ocurrido", debido a que hasta ayer la dependencia no había hecho públicos esos datos.

La comisión reveló que por conducto de visitadores trató de realizar exámenes toxicológicos a los presuntos responsables del ataque, pero la Sedena no lo permitió, con el argumento de que serían sus propios investigadores los que harían esas pruebas, por lo que la CNDH solicitó copia certificada del resultado de las mismas.

En un comunicado de prensa, el organismo encabezado por José Luis Soberanes informó que su personal inspeccionó de manera ocular el lugar de los hechos y recabó evidencias, entre ellas cinco cartuchos y 12 casquillos, así como una jeringa hipodérmica, que serán sometidos a exámenes de laboratorio.

La comisión también solicitó que las autoridades militares informen sobre los fundamentos y motivos, la normatividad o las directivas que facultaron a los soldados a colocar un retén en el lugar de los hechos, así como una copia certificada de la orden respectiva.

Por otra parte, personal de la CNDH elaboró actas circunstanciadas y cuenta con fotografías y videograbaciones de entrevistas con familiares y otras personas que colaboraron en el transporte de los cadáveres y el rescate, auxilio y traslado de los heridos.

El organismo destacó que de acuerdo con el testimonio del conductor de la camioneta no era visible ningún retén ni señalización con la cual se indicara a los automovilistas que debían detenerse. El jefe de familia sostuvo ante el personal de la CNDH que desde la oscuridad le ordenaron que se detuviera al mismo tiempo que recibía disparos de arma de fuego.

El organismo consideró que "todas las autoridades, incluidas las militares, deben informar con suficiencia a la ciudadanía acerca de los procedimientos utilizados en carreteras y caminos por el personal que efectúa revisiones, incluso sorpresivas, de vehículos y personas al amparo de la campaña permanente contra el narcotráfico y la aplicación de la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos. Estas medidas de información a la ciudadanía deben comprender la descripción de los avisos y cualquier otro tipo de señalización preventiva, los procedimientos habituales de una inspección y los que deben seguirse, eventualmente, para la remisión de personas y objetos y puesta a disposición de la autoridad ministerial correspondiente".

La CNDH también solicitó informes del caso a la PGR, la Secretaría General de Gobierno de Sinaloa, la procuraduría estatal, el Hospital General de Culiacán, la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Sinaloa y la Cruz Roja Mexicana.

La imparcialidad de la Ley

Dan a la Cámara más pruebas de los delitos de lesa humanidad del Ejecutivo oaxaqueño

Exige la APPO reactivación inmediata del juicio político contra Ulises Ruiz


Advierten a Diódoro Carrasco que de no hacerlo violará la ley de servidores públicos

ROBERTO GARDUÑO



La fracción del PRD en la Cámara de Diputados y un grupo de dirigentes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) exigieron al presidente de la Comisión de Gobernación, Diódoro Carrasco Altamirano, que abandone su postura omisa y reactive de inmediato el proceso de juicio político contra el gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz.

A casi un año de iniciada la movilización social en aquella entidad, y la posterior represión de ésta por las fuerzas policiacas,
la APPO exigió a Carrasco Altamirano -ex priísta y ahora integrante de la bancada del PAN en San Lázaro- que actué de inmediato y convoque a la Subcomisión de Examen Previo, encargada de los procesos de juicio político, para emprender los trabajos que conduzcan a elaborar un dictamen de procedencia, porque, de lo contrario, violará la Ley Federal de Responsabilidades de los Servidores Públicos.

Durante dos horas, una veintena de integrantes de la APPO, acompañados por la legisladora perredista Aleida Alavez, se entrevistaron con el también ex gobernador de Oaxaca, a quien entregaron un legajo con mayor cantidad de pruebas que sustentan la responsabilidad de Ulises Ruiz en delitos de lesa humanidad.

La representante perredista refirió ante Carrasco Altamirano, quien también como priísta fue secretario de Gobernación, que entre
un sector numeroso de la sociedad oaxaqueña persiste malestar porque la demanda de juicio político se mantiene congelada.

La respuesta del ahora panista redundó en que en el curso de la próxima semana se reactivará el procedimiento.

A decir de la diputada Alavez, al presidente de la Comisión de Gobernación
se le recordó que sobre Ulises Ruiz pesan acusaciones tan serias como violación a las garantías individuales, entre ellas, "la más grave", aquellas concernientes a 26 muertes. "El gobernador de Oaxaca también es responsable de criminalizar la movilización social, porque intenta desactivarla con una estrategia de violencia que es inadmisible".

Fue Gilberto Hernández Santiago, integrante de la APPO, quien informó que se presentó a Carrasco Altamirano una relación histórica de los hechos de violencia contra el movimiento social en su estado.

"Ulises Ruiz aplicó una estrategia contrainsurgente, con escuadrones de la muerte y la siembra de droga entre los integrantes de la APPO al momento de ser detenidos por la policía. En Oaxaca siguen sin respetarse las libertades individuales. Por tal razón, exigimos a Diódoro Carrasco, quien ya está violando la Ley Federal de Responsabilidades de los Servidores Públicos, que resuelva el proceso de juicio político, porque el gobernador mantiene una estrategia mediática para acallar el movimiento social".

Su compañera María del Carmen López también demandó al gobierno federal que no asuma una posición omisa, porque de él depende, en gran parte, que Ulises Ruiz continúe en la impunidad.

"Decimos al gobierno federal que no se vuelva cómplice de lo que está pasando en Oaxaca, y a los diputados les demandamos que no asuman consignas contra el movimiento social, que cumplan el mandato del pueblo oaxaqueño, porque con su presencia, Ulises Ruiz, viola la paz en la entidad."